¿Quién no ha visto alguna vez un lindo cachorro por la calle y ha esbozado una sonrisa? ¿O ha visto pasear patitos, en fotos o en persona, y se ha sentido mejor? La sensación de bienestar que provocan estas adorables imágenes no es falsa: existen y son buenas para la salud. Universidad de Leeds Según el estudio, ver imágenes de animales bonitos tiene un impacto positivo en nuestro organismo.

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Cachorro juega con un chorro de jardín que salpica agua delante de él.

El estudio se realizó en colaboración con la Turismo Australia Occidental El equipo reunió a 19 personas para ver vídeos cortos y fotos de un montón de animales simpáticos, entre ellos el quokka "sonriente", una especie de marsupial llamado "el animal más feliz del mundo".

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Cerdito comiendo heno: monada, monada, monada.

Tras la presentación de las diapositivas, 15 de los 19 participantes mostraron una presión arterial más baja que antes de la exposición y también una reducción de la frecuencia cardiaca. El grupo también se sometió a una evaluación de los niveles de ansiedad que demostró una reducción de casi el 50% en los niveles de estrés tras contemplar a los animales.

Según el investigador Andrea Utley Cree que la proximidad física a estos animales daría aún mejores resultados.

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