Hace falta fuerza para ser vulnerable, pero sobre todo, hace falta valor para decirle al mundo que las mujeres no necesitan ser perfectas ni cumplir absolutamente las expectativas de nadie. Las mujeres tampoco necesitan ser delgadas, madres y estar siempre sonriendo. En tiempos de redes sociales y perfiles que hacen un flaco favor a la libertad femenina, Instagram Mujeres en la vida real, no se preocupa por una alimentación bonita, sino real, y reúne fotos de mujeres reales a las que les importan un bledo las expectativas de la sociedad.
Para demostrar que las mujeres no necesitan filtros y retoques irreales, el perfil ha estado compartiendo momentos crudos de su vida cotidiana como mujer. Ese lado que la gente apenas muestra. La expectativa en torno a las mujeres siempre ha sido salvaje. Las mujeres necesitan casarse, tener hijos, ser buenas madres, independientes, bellas, delgadas y preferiblemente sumisas. Todo al mismo tiempo. Como si eso fueraposible.
"Creo que deberíamos centrarnos en lo que han hecho nuestros cuerpos, en lo que son capaces de hacer, y estar orgullosas de nuestro aspecto gracias a ello".
Con más de 150.000 seguidores y creciendo día a día, esta página es esencial para quienes quieran reflexionar sobre la igualdad de género. Porque es importante hablar de empoderamiento e igualdad salarial, pero ante todo hay que arrojar luz sobre la tiranía de las expectativas que la sociedad tiene de las mujeres.
Una madre entrega a su bebé a una desconocida para que rellene unos documentos en la sala de espera del médico
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"Un saludo a todas las mujeres que lo intentan. Intentan mirarse en el espejo más a menudo, hacer gimnasia, salir guapas en la foto, añadir más peso a la barra, meterse en la ropa...".
"Mi marido tomó esta foto cuando me quedé dormida sentada, amamantando a nuestros gemelos de dos semanas. Agotada no describe del todo esa experiencia, ya que me estaba recuperando de dos tipos de parto (bebé A vaginal, bebé B por cesárea)".
En 2019 algunos lugares aún obligan a las mujeres a cubrirse mientras dan el pecho
"Tengo 30 años, no estoy casada, no tengo hijos y todo va bien"
"Tengo celulitis, ¿y qué?".
