¿Es un gato? ¿Es un perro? Conozca al "gato más grande del mundo", una mascota tan grande que la gente cree que es un perro... y sigue creciendo. Se llama Kefir y vive con su tutora, Yulia Minina, en la pequeña ciudad rusa de Stary Oskol.

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Hace casi dos años compró a Kefir -que debe su nombre a una popular bebida láctea fermentada- como gatito de raza Maine Coon. Ahora dice que la mayoría de la gente piensa que Kefir es un perro.

"No podía imaginar que un gatito normal pudiera llegar a ser tan grande. Sin embargo, es muy inteligente y siempre se comporta con calma", cuenta Yulia al portal Good News Network.

Kefir tiene ahora 1 año y 9 meses y pesa unos 12 kg. Aunque el gato ya es enorme, Yuliya espera que crezca un poco más: "Es normal que los Maine Coon sigan creciendo hasta los 3 años", dijo a Bored Panda.

Yuliya reveló que el único inconveniente de tener a Kefir es la gran cantidad de pelo que el gato deja por toda la casa. Aun así, se le trata como a un verdadero miembro de la familia y siempre se sienta junto a Yuliya y su familia a la mesa cuando están cenando.

Otra dificultad que cuenta Yuliya sobre Kefir es que el gato se ha acostumbrado a saltarle encima por la noche mientras duerme. "No lo hacía cuando era más pequeño y no era tan incómodo, pero ahora el gato se ha hecho muy grande y pesado. No es tan fácil dormir así".

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