Aunque en muchos casos los prejuicios y la violencia contra las personas transexuales empiezan en casa, desde la propia familia, siempre es inspirador ver casos en los que ocurre lo contrario: donde el amor de un padre no reconoce tales cuestiones En nombre de la felicidad real y sin restricciones de tu hijo o hija.
Este ha sido el feliz caso de Jessyca Dias la primera transexual de la ciudad de Jundiaí con derecho a utilizar su nombre social en su documento sin haberse sometido a cirugía de reasignación de sexo.
A los 15 años, Jessyca asumió ante su familia que era una mujer trans, y comenzó sus transformaciones corporales a los 18. Desde el principio, sin embargo, su familia le ofreció todo su apoyo, hasta el punto de que, tras un caso de agresión sufrido por Jessyca, su padre, Arlindo Dias Decidió que, para proteger a su hija, la acompañaría allá donde fuera, incluidos bares y clubes nocturnos. Y así lo hizo, y garantiza que lo hará, siempre que sea necesario.
Ver también: Rivotril, uno de los medicamentos más vendidos en Brasil y una fiebre entre los ejecutivosJessyca, su padre y su hermana
Ver también: Los fans de GOT crean un mapa de alta definición de Poniente que parece Google MapsHoy Jessyca tiene 32 años, pero su padre dice que desde muy pequeña se dio cuenta de que era diferente - y que incluso cuando no entendía el proceso por el que estaba pasando su hija, nunca dejó de ofrecerle su apoyo. Tuvieron que pasar cuatro años de batalla legal antes de que pudiera cambiar su nombre en su documento, y hoy Jessyca dice que se siente realizada, no sólo por su vida, sino para demostrar que los transexuales tienen derechoscomo todos los demás.
El logro de la hija es necesariamente también el de su padre, quien, antes que cualquier género, identidad o ropa que lleve, considera fundamentalmente que la felicidad de su hija es su misión.