El fútbol sigue siendo el deporte más practicado del mundo, con aficionados y jugadores en todos los rincones del planeta. No es diferente en Henningsvær, un pequeño pueblo pesquero de Noruega, que alberga uno de los campos más chulos jamás vistos.
Henningsvær solo tiene 0,3 km² de superficie, y en 2013 la población oficial era de 444 personas, sin embargo, el campo de fútbol, llamado Henningsvær Idrettslag Stadion, sigue en pie y bien cuidado, albergando partidos de aficionados y entrenamientos para niños y adolescentes.
Para hacer el campo fue necesario rellenar el terreno rocoso al sur de la isla de Hellandsøya antes de instalar el césped artificial sobre el que rueda el balón. El estadio, si se le puede llamar así, no tiene gradas, sólo franjas de asfalto alrededor del campo desde donde se pueden ver los partidos, pero cuenta con generadores capaces de alimentar reflectores para los partidos nocturnos.
Aunque los jugadores tienen una visión especial desde dentro del campo, tener que ir a buscar un balón que se ha ido no debe ser una de las tareas más divertidas...
Ver también: Conoce la enfermedad que inspiró la risa del Joker y sus síntomasVer también: Abuela, la, la, la': la historia de la abuela que se convirtió en el símbolo del histórico título mundial de Argentina