La historia de Julie d'Aubigny (1670 o 1673 - 1707) es digna de un guión de Hollywood. Conocida como La Maupin o Madame de Maupin, por su matrimonio con Sieur de Maupin, fue una cantante de ópera y figura célebre en la Francia de finales del siglo XVII. Una mujer que se adelantó a su tiempo en una época en la que la figura femenina se consideraba supeditada al hombre.

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La Maupin tuvo cierta cercanía con la realeza debido al trabajo de su padre, Gaston d'Aubigny, responsable de los caballos reales y otros protocolos de la corte de Luis XV. Fue gracias a su padre que Julie aprendió a montar y a manejar armas como espadas.

Gastón no permitió que la Maupin se relacionara sentimental ni -mucho menos- sexualmente con nadie. Las restricciones llevaron finalmente a la joven a relacionarse con el jefe de su padre. Su relación no duró mucho y finalmente se unió en matrimonio concertado con el marido que le dio el nombre con el que se hizo famosa.

Su romance duró poco y pronto la Maupin encontró la forma de fugarse con un nuevo interés amoroso, un espadachín, con el que se ganaba la vida viajando por Francia realizando duelos de espadas por dinero.

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Muy hábil, Julie solía vestirse de hombre en sus actuaciones y a veces era necesario convencer al público de que, en realidad, era una mujer. Pocos creían que una figura femenina pudiera manejar así la espada.

Como persona que no permanece mucho tiempo "rascando en el mismo poste", pronto la Maupin dejó al espadachín y se lió con una mujer, hija de un comerciante local. Al enterarse de su encuentro amoroso, el padre de la amante no tardó en encontrar la manera de enviarla a un convento. Cuenta la leyenda que la Maupin decidió fingir que quería hacerse monja para poder tener una relación con su novia.

La historia de ambos acabó de forma apoteósica: murió una monja anciana. La Maupin desenterró el cadáver, lo colocó en la cama que pertenecía a su novia y prendió fuego al convento. Los dos escaparon y permanecieron juntos durante algún (corto) tiempo, hasta que Julie fue capturada y condenada a muerte por el incendio.

La cercanía, hasta cierto punto, que tenía con la corte del rey hizo que fuera perdonada y poco después un encuentro le hizo cambiar de vida.

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Julie entabló amistad con un actor local que le enseñó lo que sabía sobre arte dramático. Tras un primer intento fallido, la Maupin fue contratada para trabajar como cantante lírica en la Ópera de París.

Las cantantes de ópera de entonces eran casi como las estrellas de rock de ahora, o las divas del pop, por ejemplo.

Una vez, en un baile real, Maupin ligó con una joven muy solicitada en la corte. Cuando Julie decidió ir un poco más allá y besar a la joven, fue retada por tres de sus pretendientes a un duelo de espadas. Ni que decir tiene que los derrotó con facilidad.

No se sabe cómo murió, pero se estima que su partida se produjo a la edad de 33 años, hacia 1707.

El siguiente vídeo está disponible, en inglés, en YouTube y resume la historia de La Maupin: